El territorio mexicano ha deportado a niños migrantes no acompañados que intentaban llegar a los Estados Unidos en un intento de escapar de la violencia por pandillas o que viven en sus hogares.
Fue un reconocido periodista español reconocido por la ONU por su gran trabajo en este tema quien aseguró la información.
«En México por desgracia, aparte de tener un grave problema de violencia, tenemos un grave problema de impunidad», manifestó a EFE Manu Ureste, el periodista español que radica en México y que ganó un premio de la ONU por su investigación «Niñez migrante, promesas de papel».
El reportero que en la actualidad labora para “Animal político” se trasladó a la ciudad de Nueva York para reunirse con representantes de Unicef, esto como parte del Premio Breach/Valdez en la categoría de Derechos de la Niñez y Adolescencia otorgado en el año 2023 por Naciones Unidas de México, un galardón que lleva el nombre de dos periodistas asesinados en tal país.
Manu Ureste recordó que en 2021, México implementó una reforma que prometía al territorio nacional ponerlo a la vanguardia en la protección de derechos de los niños, pero “eso sólo quedó en papel”.
Dicha reforma establecía que cualquier caso de un menor de edad en México debe ser evaluado de manera individual antes de tomar la decisión sobre su futuro, prohibiendo las detenciones en cárceles de inmigración.
Además, quedó establecido que las Procuradurías de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes serían las responsables de decidir en primera instancia si el menor sería o no deportado después de la evaluación pertinente del caso, no del Instituto Nacional de Migración (INM).
De acuerdo con la investigación del periodista, entre los meses de enero de 2021 y mayo de 2022 cuando entró en vigor la reforma, fueron detenidos 98.671 menores de edad, aunque sólo pasaron por el nuevo sistema de evaluación 19.067, un 19%.
Ureste remarcó que todo el mundo sabe de los problemas a los que se enfrentan las personas migrantes en un intento de llegar a los Estados Unidos persiguiendo el anhelado sueño americano, pero se desconoce la historia de los miles de niños que no están acompañados y que dejan su país de origen para escapar de la pandilla MS-13.
Con la finalidad de conocer sus historias, el periodista emprendió un viaje a Honduras, en donde logró entrevistar a varios menores, entre ellos uno que fue deportado y que se encuentra escondido en su casa para evitar que la pandilla sepa que ha regresado, ya que dejar el país sin tener permiso de la pandilla les puede costar la vida.
Agencias.