La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, y su partido, Morena, han echado a andar la maquinaria para llevar a cabo cuanto antes las consultas públicas sobre la iniciativa de reforma al Poder Judicial impulsada por el oficialismo, que entre sus puntos más espinosos prevé la posibilidad de que todos los jueces federales, incluidos los ministros de la Suprema Corte, sean elegidos por voto popular.
La bancada de Morena en el Congreso ha pedido formalmente a la Cámara de Diputados ser la instancia que organice foros en los 32 Estados del país. A su vez, Sheinbaum ha anunciado que el partido aplicará una encuesta nacional para conocer la opinión ciudadana sobre los jueces. El oficialismo busca desahogar en dos meses un debate público sobre los alcances de la polémica reforma, punta de lanza del pulso del presidente Andrés Manuel López Obrador contra el Poder Judicial.
El objetivo es llegar a septiembre, mes en que toman posesión los legisladores electos el pasado 2 de junio y el último del sexenio de López Obrador. Sheinbaum ha ofrecido hacer a la propuesta de reforma los ajustes necesarios, resultado de las consultas.
Ricardo Monreal, aún senador y que en la nueva legislatura pasará a ser diputado, ha presentado este miércoles la petición de que la Cámara baja organice un “parlamento abierto” para contribuir a la difusión, estudio y análisis de la propuesta de reforma judicial. La de Diputados es la Cámara de origen, donde se encuentra ahora la iniciativa que envió López Obrador el 5 de febrero. “[Se] exhorta a la Cámara de Diputados a que […] organice y lleve a cabo foros en modalidad nacional y regional en los que se aborden los temas centrales de la reforma en materia judicial, como son los mecanismos democráticos de elección de jueces, magistrados y ministros; integración y funcionamiento de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y reformas a la organización del Poder Judicial en materia administrativa y disciplinaria, entre otros”, indica una carta firmada por los legisladores del oficialismo.
Por su parte, Sheinbaum ha dado detalles de la encuesta que anunció el martes para conocer la percepción pública del Poder Judicial. La presidenta electa ha precisado que el partido conducirá el sondeo, ya sea a través de su departamento de encuestas, ya contratando a una empresa demoscópica privada. Ha indicado que en una reunión con el dirigente de Morena, Mario Delgado, se acordó que el partido determine la metodología y las preguntas del cuestionario. “Sería una metodología representativa para todo el país, qué opina la ciudadanía de los jueces, los ministros, de la elección”, ha explicado este miércoles. Sheinbaum ha aclarado que no se trata de una consulta popular, un mecanismo previsto en la ley para que la ciudadanía se pronuncie acerca de políticas públicas y reformas legislativas. “No planteamos una consulta, dije que sería bueno saber la opinión de la ciudadanía con una encuesta”, ha puntualizado. Delgado ha anunciado, a su vez, que Morena hará una campaña informativa para dar a conocer el contenido de la reforma judicial y otras iniciativas enviadas al Congreso por López Obrador en febrero.
La encuesta de Morena es parte de las consultas públicas que ha echado a andar el oficialismo en torno a la propuesta de reforma judicial. La iniciativa propone que vayan a elección los cargos de ministros de la Suprema Corte de Justicia, consejeros del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), magistrados del Tribunal Electoral federal (TEPJF), magistrados de circuito y jueces de distrito. En total, más de 1.600 cargos judiciales irían a las urnas, a los que podrán postularse miles de abogados. La primera elección de todos estos cargos judiciales se realizaría en junio de 2025. Se plantea además una reforma al CJF, el órgano encargado de la administración de la judicatura y de la vigilancia de la actuación de los jueces (a excepción de los ministros de la Suprema Corte y los magistrados del Tribunal Electoral). Se propone crear por separado un órgano de administración judicial y un Tribunal de Disciplina Judicial con facultades para sancionar a todos los miembros de la judicatura, incluidos los ministros.
La enmienda judicial ha suscitado nerviosismo en los mercados financieros, que ven con incertidumbre la manera como la nueva presidenta hará uso de la aplastante mayoría calificada que su partido obtuvo en las urnas el 2 de junio. Los inversionistas temen que, con la reforma del oficiamismo, se desbarate uno de los más importantes contrapesos al Gobierno de López Obrador: el Poder Judicial. La moneda nacional ha resentido el nerviosismo financiero y este miércoles se ha situado cerca de las 19 unidades frente al dólar.
Agencias.