Durante los Juegos Nacionales de la Conade los deportistas de aguas abiertas nadaron en Campeche a 33 grados, dos arriba de lo que la regla internacional permite. Hubo 20 desmayados y con golpe de calor, hechos que fueron minimizados.
Los nadadores que participaron en la prueba de aguas abiertas los Juegos Nacionales de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) que tuvo lugar en Campeche fueron expuestos a temperaturas de entre 32 y 33 grados, lo que provocó que al menos 20 de ellos sufrieran desmayos porque se violaron las disposiciones internacionales en las que esta disciplina debe llevarse a cabo.
Pese a que no ocurrió ninguna fatalidad dadas las condiciones las competencias no debieron haberse realizado. La dependencia responsable de la organización de dicho evento deportivo es el Instituto del Deporte del Estado de Campeche (Indecam) que dirige Francisco Rogelio Menéndez Botanez, quien fue nombrado por la gobernadora morenista Layda Sansores.
Como la reglamentación internacional prohíbe competir en estas condiciones los entrenadores que trabajan para los diferentes institutos del deporte de los estados tampoco debieron permitir que sus alumnos nadaran.
La competencia —que se desarrolló en Playa Bonita del 3 al 7 de junio— tuvo que haber sido cancelada puesto que la Federación Internacional de Natación (World Aquatics) estipula que no se puede nadar con temperaturas menores a los 16 grados ni mayores a los 31. Si esta reglamentación no se cumple los nadadores están expuestos a desmayos, golpes de calor e incluso la muerte.
El encargado de la logística de la competencia fue David Callejas, coordinador de Aguas Abiertas de la Federación Mexicana de Natación (FMN) que ya no es reconocida por la World Aquatics (WA), y es el brazo derecho del defenestrado expresidente Kiril Todororov, quien tampoco goza del aval del organismo internacional y a partir de octubre comenzará su juicio por el probable delito de peculado por el cual ha sido vinculado a proceso en tres ocasiones.
Como Todorov es protegido de la directora de la Conade, Ana Guevara, la funcionaria determinó que la FMN operara las disciplinas acuáticas durante los Juegos Nacionales de la Conade. El exfederativo a su vez puso en manos de Callejas la realización de la prueba de aguas abiertas.
“Sí hubo golpes de calor, pero hubo saldo blanco”: Indecam
La coordinadora de Medicina y Ciencias Aplicadas al deporte del Indecam, Guadalupe Mendicuti, confirmó a Proceso que 20 deportistas no terminaron la competencia por golpe de calor, pero que fueron atendidos en el lugar y hubo “saldo blanco”:
Tuvimos competidores con cierto cansancio y fue un aproximado de 20 personas. Puedo decir que sí hubo golpes de calor (…), la temperatura pues no nos ayudaba mucho, sin embargo, eso pasa normalmente. Pero repito no pasó a mayores.
Al ser cuestionada sobre la extrema temperatura del agua y por qué se realizó la competencia explicó que ella y su equipo no tuvieron nada que ver con las mediciones de la temperatura ni la logística del evento.
“Desconozco la temperatura del agua y considero que no estuvimos en esa situación, pero es una realidad que los golpes de calor pueden pasar a mayores. Las temperaturas elevadas nos pueden causar ciertas consecuencias mínimas como lo es un desmayo o incluso hasta la muerte. Las temperaturas más altas que tuvimos fueron por las tardes, las consecuencias hubieran sido mayores”, sentencia.
De acuerdo con la programación de las competencias, las pruebas individuales se llevaron a cabo durante la mañana, a partir de las seis, y por la tarde se nadaron los relevos.
Los entrenadores de los muchachos que participaron en las competencias —mujeres y hombres desde los 14 hasta los 21 años— permitieron que se realizaran las pruebas a pesar de que pusieron en riesgo la integridad de los deportistas.
Muchos de los nadadores abandonaron la competencia después de haber recorrido apenas 500 metros. Algunas de las pruebas que se disputaron son, tanto en la rama femenil como en la varonil, el 5K de 14 a 15, el 7.5K de 16 a 17 años y el 10 K de 18 a 21 años.
El 25 de octubre de 2010 el nadador estadounidense Francis Crippen falleció durante la prueba maratón en aguas abiertas en la Copa del Mundo que organizó la Federación Internacional de Natación (conocida como Fina en ese entonces) en Fujairah, Emiratos Árabes.
De acuerdo con un reporte de CBS News, el ganador de la carrera, el alemán Thomas Lurz, dijo que el agua estaba demasiado caliente para competir y que el calendario era demasiado agotador. Añadió que varios nadadores se quejaron de hinchazón en dedos de manos y pies y algunos se sintieron confundidos después de competir. Tres fueron hospitalizados. La temperatura del agua el día de la competencia era de 34 grados.
Varios nadadores se dieron cuenta de que Crippen no había acabado la prueba cuando salieron del agua, por lo que equipos de rescate iniciaron su búsqueda y lo hallaron inconsciente en el mar.
Tres años después, finalmente la Fina estableció el límite de 16 y 31 grados como las temperaturas mínimas y máximas en las que se pueden realizar las competencias.
“La temperatura del agua se controlará según lo dispuesto anteriormente en intervalos de una hora durante la carrera. Si la temperatura del agua desciende por debajo de los 16°C o supera los 31°C, en cualquiera de los intervalos de medición, se volverá a medir en 30 minutos y si esa medición también es inferior a 16°C o supera los 31°C la carrera deberá detenerse hasta que la temperatura del agua cumpla con esta regla”.
El día que 20 deportistas se desmayaron en Campeche la temperatura del agua era de 33 grados y la temperatura ambiente era de 35 con sensación térmica de 40.
Redacción.