Por: Hubert Carrera Palí
El Tribunal Electoral del Estado de Campeche (TEEC) ha jugado un papel vergonzoso y rastrero en la calificación del pasado proceso electoral condicionando su “autonomía” a lo que le imponga Morena desde cuarto piso de palacio de gobierno.
El magistrado presidente Francisco Ac Ordoñez y su pleno, no tiene una actuación imparcial de justicia al momento de calificar los recursos de inconformidad que llegan desde la oposición o desde la expresión independiente de comunicadores que defienden su derecho a la libertad de expresión consagrada en la Constitución. Tan es así, que todas- o casi todas- las apelaciones que se turnan a la Sala Regional de Jalapa del Poder Judicial de la Federación sentencian finalmente lo contrario a lo que emite el tribunal estatal.
EL TEEC es la más clara versión de las instituciones “autónomas” corruptas que condicionan la ley al modelo de una izquierda populista basada en el autoritarismo del gobierno en turno, sin importar graves violaciones a los preceptos constitucionales.
Para muestra un botón, el máximo tribunal electoral del país ordenó al órgano “independiente” local que dirige convenencieramente Ac Ordoñez modificar resolutivos y amonestar al Instituto Electoral del Estado (IEEC) por no dictar medidas cautelares inmediatas contra la gobernadora Layda Sansores Sanromán por actos oficiales usados para favorecer a candidatos morenistas en la pasada elección.
El festival del Día de las Madres y la presentación de grupos musicales de moda durante las campañas políticas a favor de Jamile Moguel, ex candidata perdedora a la alcaldía de Campeche fueron muestras claras de ello, y para rematar, recientemente, el titular del TEEC apareció en un acto oficial en donde no tenía nada que hacer junto a la gobernadora Sansores Sanromán, ¿y la autonomía y el respeto a su trabajo y al pueblo Sr. Ac Ordoñez, dònde quedó?
Otra muestra del sometimiento del TEEC a la gobernadora, fue el revés que le dio el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) cuando Layda Sansores propuso a su paisano champotonero Antonio Sabido Góngora como nuevo titular del Órgano Interno de Control (OIC) del Instituto Electoral del Estado.
¿Qué atribuciones tiene la gobernadora Sansores para proponer ante un supuesto órgano autónomo como el IEEC a quien ya había sido consejero presidente en los 90?
Pero sin duda, la cereza del pastel fue la sentencia que emitió el órgano federal contra Layda Sansores por incurrir en violencia en razón de gènero, lo que le valió fuera inscrita en la lista de personas que han cometido este delito. Por cierto, fue la primera mujer señalada de ofender gravemente a personas de su mismo gènero, lo que también fue motivo para inhabilitarla dos años de cualquier cargo político.
Sin temor a dudarlo, Tribunal Electoral del Estado (TEEC) ha emitido sentencias irrisorias, absurdas, completamente complacientes de la gobernadora en materia de libertad de expresión, lo que aprovecha a través de su programa “martes de jaguar” para denostar y exhibir a periodistas que hacen de su trabajo un apostolado diario al servicio de la sociedad, desnudando con argumentos sólidos y contundentes todas las mentiras, muestras de odio, de venganzas personales; las malas acciones, complicidades, y sobre todo, corruptelas en las que incurre frecuentemente de este gobierno de cuarta.
Seguramente los desafortunados desaciertos del TEEC seguirán exhibiéndose puntualmente porque cuando de por medio está al frente un gobierno como el de Morena, lo menos que se respeta es la ley y las garantías individuales.
Ac Ordoñez debería de tener un poco de vergüenza cuando asegura que es un juzgador imparcial, cuando en el ejercicio de sus funciones demuestra todo lo contrario, como vil ser despreciable al servicio de la gobernadora, pero hay que recordarle que los cargos públicos no son eternos, todo se termina y aquí no hay una regla que marque la excepción.
