Apuntes para una primavera campechana

Por: MARGARITA ROSA ROSADO M.

Decían que en Campeche nunca pasa nada, decían que hasta el mar parece una tina,  que no hay ni olas, que en Campeche todos somos tranquilos, calmados, pacíficos, y es cierto, así somos, hasta que dejamos de serlo. El conflicto que desde hace más de diez días nos ha puesto en las páginas de los periódicos y en boca de los conductores de mediosmás importantes de todo el país, es un conflicto que se pudo haber evitado y se dejó crecer.

A veces se nos olvidan cosas muy importantes, en este caso, al gobierno del estado se le olvidó que hace menos de tres años hubo una elección muy reñida en la que quien hoy nos gobierna ganó, en cifras redondas, por cinco mil votos. Eso quiere decir que dos terceras partes del electorado no votaron por ella, pero así es la democracia, se gana hasta por un voto.

Tendría que haber tomado en cuenta que iba a estar caminando sobre suelo muy resbaladizo, que tendría que haber extremado la prudencia, privilegiado el diálogo, escuchado más al estado y en particular a una ciudad capitalque necesita en gran medida de las opciones que aportan los tres órdenes de gobierno en términos de empleo, de derrama económica. De manera que esto hace que moleste la importación de funcionarios de otros estados que no habían vivido aquí. Yo en lo personal no tengo nada en contra de los foráneos. No tengo nada en contra de personas que vienen de fuera así como también nosotros vamos a otras entidades, hay mucho campechano viviendo decorosamente en Mérida, en la ciudad de México, en Monterrey y en otroslugares donde aportan de muchas maneras a su desarrollo.

El problema es cuando llegan con un gran desconocimiento del estado a altos puestos de gobierno que requieren de toma de decisiones muy importantes queafectan el desarrollo de Campeche y la vida de casi un millón de habitantes. El problema es cuando llegan como si llegaran a territorio conquistado, con la armadura y el caballo y se sienten superiores a los locales, y en vez de hacer equipo marcan su raya y solo vienen por un tiempo, no se integran y no les interesa.

Todo esto es el telón de fondo subyacente al conflicto que hoy ocupa y preocupa a los campechanos. El conflicto que detonó la protesta ciudadana es probablemente la punta del iceberg, una de varias problemáticas que lastiman a la sociedad. Y la gobernadora dice que se está politizando el conflicto. Pues sí, no solo era lo más probable, era lo más seguro, que se politizara. Porque en poco más de dos meses iremos a las urnas, a dirimir a través del voto una elección que es la más importante de lo que llevamos del siglo, no solo para Campeche sino para el país, una elección en la quesolo hay de dos sopas, continuar en la línea del autoritarismo, del militarismo y de la pérdida paulatina de libertades o recuperar nuestro país, recuperar la senda del desarrollo.

Por supuesto que todo es política en este momento, por supuesto que los partidos políticos van a intervenir, es parte de su ADN, intervenir en asuntos públicos; si yo estuviera en un cargo de toma de decisiones en este momento, me preocuparía muchísimo porque, si en efecto el asunto se politizó y si en efecto los políticos y los partidos de oposición están tomando posiciones, quiere decir que su fuerza es muy superior a la que había supuesto el partido en el poder.

Quiere decir que Morena no tiene ni la fuerza ni el arraigo que se suponía que tenía porque si lo tuviera, pese a haber impedido que circulara el transporte urbano la tarde de la marcha, el que cerca de 15 mil campechanos, en este estado del no pasa nada, estuvieran marchando codo con codo en apoyo del personal policíaco, pero también ya con otra expectativa (se empezaron a oír  los gritos de Fuera Layda), yo estaría muy preocupada, porque como dicen, nos vemos en las urnas, y sí, ahí nos veremos.

Vamos a esperar que hayan expresiones de empatía, demadurez política y mucho ánimo de pacificación y de conciliación, pero la herida está hecha y está abierta y el 2 de junio seguramente tendremos oportunidad de comprobar si lo que pasó en Campeche tendrá repercusiones positivas y duraderas.