Columna: Episodios: Sin máscara

Por: Francisco López Vargas.

¿Cómo pretende el ex presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Saldívar Lelo de Larrea, justificar que el admitió públicamente el 8 de noviembre de 2023, en el programa de Ciro Gómez Leyva que él, sin haberse aprobado en el Senado su renuncia como ministro, desde hacía 14 años simpatizaba con el proyecto de Claudia Sheinbaum y que estaba sumado desde antes a la 4T?

¿Cómo pretende el ex ministro Saldivar navegar con una queja en su contra de 70 jueces y magistrados que narran, con lujo de detalle, cómo presionó, coaccionó, amenazó y tomó represalias en contra de quienes no aceptaron cambiar su libertad e independencia por beneficios de su presidencia en favor de los proyectos del Ejecutivo?

¿Cómo explica el ex ministro Saldivar su actuar faccioso y no el apego a Derecho que debió ser su única guía como presidente de la SCJN?

La militancia partidista y la ideologización desde el gobierno no sólo se ha convertido en un cáncer para el país de instituciones que los mexicanos construimos sino que hoy se ha llevado a extremos que nos acreditan que las elecciones siempre serán un tema muy serio que no podemos dejar en manos del gobierno como sucedía en el siglo pasado y cómo pretende la 4T que sea después de que ellos ganen o se roben la elección y demuelan las instituciones que los mexicanos construimos como diques para frenar los caprichos autoritarios de cada sexenio.

Quienes no están viendo la gravedad de la investigación J/108/2024 y se han limitado a exponer un enfrentamiento político, pero no han dimensionado el grado de exhibición que se da a los poderes de la Unión, ven que habrían consolidado la manipulación de la Constitución con la ayuda de un Congreso que, por fortuna, todavía tiene contrapesos reales. Andrés Manuel es un peligro para la democracia del país y su candidata lo será más porque ella habla de la radicalización de las propuestas de quien, para ellos, es su líder y guía moral.

Lo expuesto en la investigación ordenada por la presidenta de la Corte es una narrativa que demuele al actual gobierno y que acredita cómo se habría construido un andamiaje ilegal y al margen de la legalidad y de la Constitución para darle gusto y satisfacer a quien no le gustan los ordenamientos porque a él “no me vengan con que la ley es la ley”.

Por años, durante meses, los pasos que seguía la actual administración tenían un andamiaje para convertir a México no sólo en un miembro del foro de Sao Paulo sino para convertirlo en un país donde el autoritarismo cubano o venezolano siempre han estado en la visión de un presidente que se niega a aceptar esos fracasos que los han convertido en países que violan derechos, que desprecian la democracia y que eligen a quien sucederá al líder en turno para que siempre gobierne el guía moral, como sucede en Cuba con Díaz Canel o con Nicolás Maduro después de Chávez, herederos del poder de los verdaderos propietarios de esos países.

La investigación contra Saldívar necesariamente terminará en violaciones a la ley vigente y acreditara actitudes delincuenciales al amparo del poder público. Los testimonios de decenas de jueces y magistrados constituyen pruebas y evidencias de calidad en el actuar no sólo de Saldívar sino también de Julio Scherer Ibarra, ex consejero jurídico de la presidencia, además de todo el andamiaje de apoyo a la presidencia de la Corte.

Las implicaciones para Arely Gómez González, Netzaí Sandoval Ballesteros, Héctor Manuel Bonilla del Ángel, en todo el entramado judicial que operaba para favorecer a López Orador y a Saldívar constituirían toda una asociación de funcionarios públicos para delinquir utilizando para sus fines despachos privados que recibían trato preferencial en temas específicos.

Lo auténticamente grave es la fractura que se exhibe en dos de los poderes pilares de la Unión: el legislativo al servicio del presidente y el judicial operando también para complacer los deseos de un solo hombre que llegó al poder usando los andamiajes democráticos, proponiendo leyes que acotaban el poder presidencial y el uso de los fondos públicos para coacción y compra de votos y que, al ser él el presidente, quiere dinamitar lo que él mismo promovió y con ello queda expuesta su ausencia de ética democrática y exhibe un talante autoritario que le quita la máscara a quien se decía representante del pueblo, ese al que hoy quiere anular y cancelar sus derecho a elegir para perpetuarse en el poder aunque él no sea el presidente, pero si el que manda.

Pensar que Claudia será autónoma, que se desprenderá de quien la ha llevado al poder es de una ingenuidad que se olvidan de la revocación de mandato, del andamiaje de su movimiento donde los radicales se encargarán de corregir y de regresar al carril a quien no lo entienda: Andrés es el guía y patriarca.

Campeche

La presión a los policías en Campeche no ha parado. Layda Sansores pretende imponer a policías de fuera del Estado, como su gabinete, y reclutar a quienes ya son parte de la Academia para desconocer a quienes hoy se manifiestan pidiéndole su renuncia y la de Marcela Muñoz.

Los intentos de por minimizar el rechazo social de los campechanos tendrá un elevado costo para quien, no lo pierdan de vista, está dispuesta a todo con tal de retener el control de un Estado que vaya que ha padecido a ese gobierno inepto. El tiempo y la semilla social la pondrá en su lugar, tarde o temprano. Hoy, Campeche es un estado sin gobierno, sin obra y sin desarrollo retrocediendo en seguridad como lo acredita la última encuesta de percepción de seguridad pública.

Esperemos.