Por: Hubert Carrera Palí
Las preguntas lanzadas por el pueblo de México a los candidatos durante el primer debate presidencial encolerizaron a AMLO narco-presidente. Trastornado, al borde del desquicio total primero culpó a los medios de información tratando de enmendar lo irrefutable. Su narrativa fracasó, se dio cuenta que el pueblo sabio ha reprobado su trabajo; la escalada de reclamos a sus acciones y programas de gobierno han constituido su más duro revés político, contrario a lo que a diario presume soberbio y burlón desde sus mañaneras.
Es incuestionable que la gran mayoría de los mexicanos consultados durante ese ejercicio cívico organizado por el INE siente en carne propia el agravio del que a diario es objeto, del grave retroceso y marcadísima desatención social en rubros tan importantes como seguridad, violencia, salud, educación atención a la mujer y sobre todo la falta de respeto a todos los sectores de la sociedad,
El narco gobierno de la 4T ofreció muchas cosas, pero no precisó que era para beneficio propio, de su familia y amigos, ahí están expuestos y sustentados los escandalosos hechos de corrupción perpetrados por los hermanos e hijos del presidente, por los amigos de estos y por sus funcionarios de primera línea.
Luego entocnes, México no es un país donde rebosa la felicidad tal y como expresa en sus deliriosas mañaneras. Al contrario, la mayoría de los mexicanos- y no Claudio X- exigió que su corcholata participante explicará detalladamente por qué el país está de cabeza, pero Sheinbum enmudeció, calló frente millones de ciudadanos que siguieron paso a paso el debate de aspirantes presidenciales.
Y aunque quiso esquivar varios señalamientos y responsabilidades en su contra como los lamentables hechos del colegio Rexamen y el desplome de un tramo de la línea 12 del metro CDMX donde en ambos casos murió gente inocente, la patria y los mexicanos le tienen en puerta el merecido juicio de la historia.
Durante sus intervenciones, la corcholata del narco presidente demostró que es de talla igual o peor que su creador Geppetto, con lo cual, de ganar, México sería un verdadero caos.
Hay muchos ejemplos del desgobierno de la 4T que ha hartado a la gran mayoría de los mexicanos. En Campeche, por ejemplo, la anarquía está a su máxima expresión. El pueblo ha tomado una decisión muy trascendental e histórica frente a la ineptitud de una gobernadora y sus funcionarios legionarios fuereños todos ellos, exigiendo renuncien, incluyendo al secretario de gobierno Armando Toledo Jamit, quien llegó a la entidad a invitación de su tío Antonio Toledo Corro, ex gobernador de Sinaloa con fuerte vínculos con el narco
Layda Sansores insiste en retar a los campechanos, en poner oídos sordos a los justos reclamos de los policías luego del fallido operativo en el Cereso de Kobén donde en nada estuvo de perpetrarse alguna desgracia humana or culpa de la titular de la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana (SPSC) Marcela Muñoz Martínez y el secretario de gobierno Armando Toledo Jamit, cuyo vínculo familias con el narco lo hace una persona sin principios y moral, pero además repugnante.
La renuncia de estos dos funcionarios y de Layda Sansores no es negociable, es una exigencia, por eso el pueblo se organiza una vez más para mostrarles su repudio durante otra mega marcha mañana que seguramente se replicará en otras ciudades porque toda la policía de este país vive circunstancias similares.
De paso será el preámbulo para decirle a Morena que sus días como gobierno están contados a partir del 2 de junio cuando se espera el peor de los castigos electorales para sus candidatos a nivel estatal y nacional. La 4T no solamente es sinónimo de desgracias y desagravios, sino tambièn de fracasos, situación que ya es totalmente intolerante.
Cuando los candidatos de la 4T toquen a su puerta para pedir su voto, solo recuérdeles las desgracias humanas que ha ocasionado, por ejemplo, el pésimo manejo de la pandemia que provocó màs de 800 mil muertes , la imparable tragedia de violencia que ha arrojado más de 140 mil ejecuciones de inocente que coloca a este sexenio como el más violento de todos los tiempos; la pésima atención a la salud y falta de medicamentos que nada tiene que ver con Dinamarca, el grave retroceso educativo, las mentiras y más mentiras, y por supuesto, en la entidad, los insultos de Layda Sansores a las madres de los policías y de Marcela Muñoz a las mujeres campechanas por no ser tan esbeltas como ella.
Aun con todo el derroche económico que hace Morena para la compra de votos este dos de junio, pagarles a consejeros del Instituto Ele4ctoral del Estado y de los tribunales electorales, los ciudadanos campechanos han determinado que ningún voto más para Morena y mucho menos para seguir sosteniendo a la más descarada corrupción.